Fue por
knock-out, en la capital de la República Dominicana. Pudimos
seguir el match por Telesur sin perder un segundo. Allí
estaban casi todos los Presidentes latinoamericanos del
Grupo de Río. Correa, presidente de Ecuador, lo había
anunciado el día antes. Me atreví a enfatizar en una
reflexión la importancia de esa reunión. No tuvo lugar en el
seno de la OEA. Lo esencial es que los diplomáticos de
Estados Unidos no estaban presentes. De una forma u otra, a
pesar de las profundas diferencias ideológicas y tácticas,
todos brillaron y reflejaron cualidades que los llevaron a
cargos importantes dentro del Estado.
Dada la
crisis actual, tales cargos adquieren relieve. El hecho real
es que muy próximo al estallido de conflictos bélicos entre
pueblos hermanos como consecuencia de las intrigas yanquis,
allí quedó sellada la paz en lo inmediato y la conciencia de
que no estamos obligados a guerras entre pueblos que
comparten sólidos vínculos de hermandad.
Mientras esto ocurría en Santo Domingo, Bush se reunía en
Washington para hablar de la transición en Cuba. Aunque todo
queda por hacer, como se ha demostrado en la reunión de La
Habana sobre Globalización y Problemas del Desarrollo, el
imperialismo fue de todas formas el único perdedor.
Fidel Castro Ruz
7 de
marzo de 2008
5 y 44 p.m. |