Estas
líneas se publicarán mañana 29 de febrero. Un gran número de
tareas nos esperan pronto. El lunes 3 se iniciará el X
Encuentro Internacional de Economistas sobre Globalización y
Problemas del Desarrollo, a los que siempre asistí y en los
cuales expresé diversos puntos de vista. Por los
acontecimientos internacionales que tienen lugar, este será
sin duda de gran trascendencia por la presencia de
prestigiosos economistas, algunos Premios Nobel y dos
eminentes jefes de Estado.
Deseo,
en lo que escribo hoy, abordar un tema.
Durante
estos días de voluntario reposo he leído gran número de
cables transmitidos por agencias tradicionales de prensa
escrita o a través de Internet. Entre estos, hay un despacho
desde Cuba del sitio digital de la BBC Mundo que repugna por
su insultante ataque personal. Publicado el 25 de febrero,
un día después de la elección del Presidente del Consejo de
Estado, bajo el subtítulo de El peso de las reflexiones,
afirma lo siguiente:
"Fidel
Castro parece querer tranquilizar al nuevo gobierno y
promete ‘ser cuidadoso’ con las opiniones expresadas en sus
editoriales, las cuales se publican en todos los medios de
difusión del país, incluyendo radio y televisión.
"En sus
reflexiones hace un nuevo ejercicio de modestia, no solo
pide que se le llame ‘compañero Fidel’, sino que sus
escritos no aparezcan en las portadas del periódico oficial,
e insiste en que los demás medios solo emitan una síntesis."
"… Se
trata solo de algo formal; aunque sus reflexiones aparezcan
en la página de deportes, su peso no será por eso menor.
Tanto nacional como internacionalmente, cualquier comentario
del ‘compañero Fidel’ repercutirá profundamente.
"En
cierta forma, es una Espada de Damocles pendiente sobre la
cabeza de los dirigentes. Todos ellos saben que sería
extremadamente difícil llevar adelante cualquier política
que sea públicamente condenada por Castro… "
"Las
relaciones entre los hermanos Castro son en Cuba un misterio
condimentado por los más disímiles rumores… "
"Cuentan
que se encerraron solos y discutieron varias horas, que
desde afuera de la oficina de Fidel se podían oír los gritos
de ambos."
"Nada
de esto se puede confirmar, no hay pruebas, solo supuestos
testigos; pero en Cuba, como en ningún otro país, cuando el
río suena es porque piedras trae, y ‘Radio Bemba’, la
transmisión oral de la información, casi siempre acierta."
Otros
importantes órganos de la gran prensa norteamericana, The
New York Times, The Washington Post y The Wall
Street Journal, expresaron frustración, pero sin acudir
a groseros insultos.
Para
muchos, nuestro país era como una caldera llena de vapor a
punto de estallar. Les choca el medio siglo de resistencia
heroica.
Las
palabras inteligentes y serenas de Raúl después que los 609
miembros de la Asamblea Nacional presentes lo eligieron por
unanimidad Presidente del Consejo de Estado, sus sinceros
argumentos, desenredaron el enredo de ilusiones creadas en
torno a Cuba. Quienes conocen bien tanto a Raúl como a mí,
saben que por elemental sentido de dignidad y respeto tal
tipo de reunión jamás se podría producir. No son pocos los
que se han quedado con las ganas de ver un súbito derrumbe
de la Revolución heroica que resistió y resiste medio siglo
de agresión imperialista.
Se
escuchan ahora aullidos de lobos atrapados por la cola. Qué
rabia les provoca en especial la elección, como Primer
Vicepresidente, de Machadito, Secretario de Organización del
Partido Comunista de Cuba, al que la Constitución otorga la
tarea principal en la conducción del pueblo hacia el
socialismo.
Como en
el mundo de las nebulosas y los protocolos lo que cuenta es
la jefatura del Estado y se considera a la organización
partidaria como un intruso indeseable, y por tanto un
principio interno, en el caso específico de Cuba debiera
bastarles saber que Raúl cuenta con todas las facultades y
prerrogativas legales y constitucionales para dirigir a
nuestro país. Como él mismo explicó, el cargo de Primer
Vicepresidente que ostentaba —y del que no se desplazó a
nadie— fue consultado conmigo en el proceso de integración
de la candidatura unitaria. No se debió a que yo exigiera la
consulta; fue decisión de Raúl y de los dirigentes
principales del país consultarme. Fue igualmente decisión
mía solicitar a la Comisión de Candidatura que en la lista
de candidatos al Consejo de Estado se incluyera a Leopoldo
Cintra Frías y Álvaro López Miera, los cuales se habían
unido a los combatientes del Ejército Rebelde cuando apenas
tenían 15 años. Ambos son mucho más jóvenes que McCain y
tienen más experiencia como jefes militares, demostrada en
victoriosas hazañas internacionalistas.
Polito
dirigió la batalla de Cuito Cuanavale, al sudeste, y la
contraofensiva al sudoeste, con más de 40 mil combatientes
voluntarios cubanos y más de 30 mil soldados angolanos, que
expulsaron de Angola a los últimos invasores del ejército
del apartheid.
El
gobierno de Estados Unidos creó condiciones para que
Sudáfrica racista, en determinadas condiciones, usara el
arma nuclear contra aquellas tropas.
López
Miera una vez se bombardeó a sí mismo cuando, en las
proximidades de Luanda, ordenó a la artillería de reacción
múltiple, disparar sobre sus propias posiciones, asaltadas y
casi ocupadas por fuerzas sudafricanas que invadieron por
primera vez a Angola en 1975.
El
tablero de ajedrez indicaba estas variantes. No eran fruto
de supuestas tendencias militaristas de Raúl, ni se trataba
de generaciones o partidos disputándose a dentelladas el
mundano poder. Por mi parte, reafirmo estar ajeno a todo
cargo, como expresé en el mensaje al pueblo el 18 de febrero
de 2008.
Uno de
los que se ha quedado sin aliento es el padre teórico de la
"independencia" de Kosovo. En una de las Reflexiones,
publicada el 22 de febrero, lo describí como "un ilustrísimo
personaje español, antaño Ministro de Cultura, impecable
socialista hoy, y desde hace rato vocero de las armas y la
guerra". (Fue además, en diversos momentos, Ministro
portavoz del gobierno, Ministro de Educación y Ciencia y
Ministro de Asuntos Exteriores).
¿Qué
dijo? "Las noticias de ayer podrían haber sido más abiertas,
mejores. De lo que no estoy seguro es de que se haya
iniciado la transición desde el punto de vista político
Todo lo que pueda ir en dirección de una transición política
hacia la democracia es bienvenido."
Habló
como si viviéramos en la España de Francisco Franco,
estrecho aliado de Estados Unidos, y no en Cuba, donde han
invertido más de cien mil millones de dólares —de mucho más
valor que los actuales— para bloquearla y destruirla.
¡Qué
hombre! ¡No hay manera de callarlo! ¿Cómo se llama? Ya la
Mesa Redonda hace dos o tres días mencionó el pecado y al
pecador: Javier Solana.
¿Dónde
milita? En el Partido Socialista Obrero de España. No
viajaría a nuestro país porque Cuba, con motivo de la guerra
contra la República Serbia, exhortó al mundo a juzgarlo como
criminal de guerra en un tribunal internacional. Como
Ministro de Asuntos Exteriores de España, me recibió en el
aeropuerto de Madrid cuando tuvo lugar la II Cumbre
Iberoamericana, celebrada en la capital de España. ¡Parecía
un ángel!
Hasta
Aznar, que aconsejó a Clinton bombardear la emisora de
televisión de Serbia, lo que ocasionó la muerte a decenas de
personas, comprende que en este momento, vísperas de
elecciones, no se puede jugar con el asunto de las
nacionalidades, pues cualquiera se da cuenta de que con esos
antecedentes el País Vasco y Cataluña se podrían acoger a
tal principio dentro de la Comunidad Europea, y son dos
naciones de las más industrializadas de España. También
pueden hacer lo mismo los escoceses y los irlandeses.
Con los
destinos de la especie humana en tales manos, es como si se
danzara alegremente en el borde de un abismo donde reina la
vanidad de no pocos jerarcas del mundo capitalista
globalizado, que ponen en riesgo a todos los países. Los
valores humanitarios, educacionales y artísticos, alcanzados
con sus propios recursos por la Revolución en Cuba que
quieren destruir, no significan nada para ellos, si no se
somete a la tiranía del libre mercado; este y sus leyes
ciegas están hundiendo a la especie humana en una crisis
económica insostenible y un cambio en las condiciones
naturales de vida que puede hacerse irreversible.
Es para
luchar contra eso que escribo Reflexiones. A lo mejor, si
abundara el tiempo, estaría dispuesto a escribir para
refrescar recuerdos que hoy están dispersos en discursos,
entrevistas, diálogos, declaraciones, reuniones, reflexiones
y cosas por el estilo. He gastado toneladas de papel y
toneladas de sonidos —valga la expresión simbólica—, pero no
tengo motivos para avergonzarme.
Fidel Castro Ruz
28 de
febrero de 2008
7 y 15 p.m. |